sábado, 14 de septiembre de 2013

Morir en Septiembre

Llevan los pájaros de septiembre,
todas mis palabras en sus alas.

Se harán rebeldes;
aun así,
construirán nidos en tu vientre.

Con mi boca
hilarán las líneas
que no se escribieron.

Porque el verano
secó tu piel y mis manos.

Somos pasto para ciegos.

Se pararon las fuentes,
se congeló el sauce que lloraba,
se detuvo el tiempo,
pero no mi palabra.

Todo nuestro mundo…
cabe ahí,
en ese nido de tu ombligo.

© Blanca