miércoles, 17 de julio de 2013

A veces...

A veces…
las manos no llegan a sostener,
todo lo que amamos.

Se queda en el camino,
se cae por los lados.

Son historias de vida,
de momentos y nombres;
son trayectos de hilos tensados.

A veces…
las manos pesan
de tantos ritmos llevados,
callados.

A veces…
la vida misma es roca
y arena.

A veces…
tan solo miro al mar
y callo.

© Blanca

Soledad

Es tanta la soledad,
que el vuelo de mi falda
llena todos los rincones.

Me horada
y me hace toda círculos pequeños,
grandes
medianos
cerrados
y circunscritos dentro de mí.

A veces asoma el corazón
pulsando suave.

Cruza un mirlo,
me deja una canción muda.

Otras,
solo el roce de sus plumas.

Cuando respiro,
trago al mismo tiempo
Intervalos de tu ausencia
y se hacen más círculos,
que me van comiendo entera
hasta quedarme en nada.

Aun así, respiro,
porque la NADA también existe.


© Blanca